El mundo de las finanzas atraviesa un proceso de transformación relacionada con la tecnología, a partir de la cual se ofrecen distintas formas de inversión y gestión del patrimonio. Se habla de una democratización de la economía, dado que la planificación financiera comienza a estar disponible para todos, sin necesidad de estar bancarizado. Ahora, los propios usuarios gestionan y hacen crecer su patrimonio.
Hasta llegar a este panorama actual, se atravesó por un desarrollo ligado a la tecnología, sobre todo con las aplicaciones de plataformas que permiten la independencia, sin la necesidad de contar con un gesto.
El nacimiento de las finanzas digitales
El comienzo de los años 2000 trajo consigo una revolución tecnológica, gestada por al menos una década. Desde la expansión del Internet, un nuevo mundo a través de una computadora se abrió, lo que luego le dio paso a contar con todos los accesos disponibles en un celular.
Lo cierto es que las primeras plataformas de inversión online llegaron con el comienzo del nuevo siglo. Y el objetivo era puntual: abrir paso a los mercados financieros. De allí surgieron los primeros inversores online.
En su mayoría eran usuarios minoristas que comenzaron a comprar y vender acciones sin la necesidad de contar con un asesor financiero tradicional; el gran beneficio era la reducción de los costos de transacción.
En ese momento, se vio el crecimiento de los inversores, aunque la experiencia del usuario contaba con grandes limitaciones debido a las precarias interfaces para realizar las acciones.
No obstante, fue un punto de partida muy importante, ya que permitió que miles de personas participaran en los mercados y conocer la posibilidad de hacerlo, sin tener un gran capital de inversión, ni conocimientos.
En menos de una década, el avance en este aspecto fue sumamente relevante. La evolución fue tanto en relación con las plataformas en cuanto a sus interfaces como en los servicios sofisticados que comenzaron a abarcar en el ámbito financiero.
Conceptos nuevos como robo-advisors, cuya función es de ser un asesor robotizado y automatizado, y las fintech que es la regulación de las actividades relacionadas con la innovación, comenzaron a tomar gran lugar en la escena financiera. En ambos casos, surgieron como respuestas a la creciente de los inversores para realizar gestiones.
En este contexto, la innovación en los móviles jugó un importante rol siendo una herramienta de acceso inmediato a diversos mundos. De aquí el surgimiento de aplicaciones para llevar en el celular y dar respuestas a distintas necesidades.
El trading surgió en este momento para compraventa de activos cotizados, esto fue una nueva experiencia para el usuario, ya que el servicio era más intuitiva y accesible. Asimismo, dio paso a una generación de jóvenes para adentrarse a un mundo financiero nuevo y atractivo.
El desarrollo continuó con la inserción del acceso a los usuarios, para observar y copiar las estrategias de inversión terceros. También el surgimiento de las redes sociales colaboró en este aspecto, siendo un medio de comunicación masiva, que incluyó este nuevo mercado, generando comunidades.
La innovación e inteligencia artificial en las finanzas
La inteligencia artificial llegó para solucionar problemas de todo tipo y en las finanzas no son la excepción. Los algoritmos avanzados ahora pueden analizar datos para identificar oportunidades de inversión y ajustar estrategias de inmediato.
Como así también, la IA permite que un inversor pueda crear sus propios algoritmos, sin necesidad de conocimientos avanzados en programación.
En la misma línea, permite la creación de herramientas para hallar una personalización de la inversión Algunas de ellas permiten adecuar la experiencia humana para adaptarse a cada necesidad a tal punto que se puede acceder a una asesoría financiera híbrida al ofrecer un asesoramiento personalizado de expertos.
Los nuevos inversores: análisis y estrategias en el mundo digital
Con el desarrollo y la facilidad de acceso a este tipo de plataformas se dio paso a un cambio radical respecto al comportamiento de los inversores. La llamada democratización de la inversión permitió que personas que antes no tenían acceso a la gestión de las finanzas se adentren en este mundo para comenzar a invertir.
El aumento de este tipo de mercado y un aumento de los usuarios trajo consigo una necesidad de educación financiera debido a que se registraron gestiones impulsivas de grandes riesgos, y pérdidas.
De aquí la importancia de no olvidar la estrategia de planeamiento, la era digital no deja por fuera los riesgos económicos, aunque la evolución tecnológica da accesos nuevos con una gran transformación financiera.